Escribir de Casa Zaca es escribir de un negocio emblemático del Real sitio de La Granja de San Ildefonso y yo añadiría de un de los mejores restaurante de la provincia de Segovia.
Ubicado en la calle Embajadores esquina con la calle del Cristo ocupa un el lugar donde estuvo la antigua Casa de Postas, desde la que se hacían trayectos de pasajeros y mercancías en coche de caballos hasta Madrid. En la última reforma se descubrió un letrero que indicaba la subida a los comedores en el piso inmediato superior, con lo que se confirmó que fue, además, casa de comidas.
Fue hace casi setenta años, en el año 1940, cuando Don Zacarías Peinador (al que debe su nombre) alquiló ese local para su uso como taberna y almacén de vinos, y así continuó hasta que su hijo, Mariano Peinador, y su mujer, Antonia Cornejo, compraron el establecimiento y lo reformaron y acondicionaron para restaurante. Hoy en día nuevas generaciones continúan ocupándose del negocio familiar y un hijo de Antonia, Zacarías sigue haciendo honor al nombre y a la tradición familiar.
Son sublimes sus Judiones de la Granja guisados, su cocido con una impresionante sopa de las que se cortan con cuchillo, sus cebollas rellenas que les han otorgado honrosa fama, la gallina en pepitoria guisada como las de hace años, la caldereta de cordero que sobrepasa de largo al típico cordero asado de estos lares, la lengua estofada, los callos, etc. Los postres pocos pero todos caseros y por esta época podéis encontrar torrijas, para que más.
Recientemente ha sufrido una reforma total que ha mantenido cerrado el negocio durante ocho meses y que ha dejado como resultado un lugar completamente renovado y modernizado con diferentes salas y comedores ubicados en diferentes alturas y con un ambiente más cuidado y moderno. A pesar de ello el restaurante no ha perdido el ambiente familiar que le dio origen y mantiene su comida tradicional de producto y con marcado carácter casero.
En Zaca toda su carta es recomendable, dejaros llevar por su cocina tradicional que huye de las típicas cartas segovianas que a menudo abusan de asados y olvidan la esencia de la cocina castellana.
Probar un sitio diferente, por auténtico, que os garantizo no os defraudará.
Os dejamos unas fotos de nuestra última experiencia.
Restaurante Casa Zaca
c/ Embajadores, 6
40100 San Ildefonso – La Granja
Segovia
España
Tel: + 34 921 47 00 87
Web: http://www.casazaca.com
[...] unas semanas tras escribir del Restaurante Casa Zaca de La Granja de San Ildefonso en las proximidades de Segovia hacía un comentario sobre sus callos [...]
Maluisa, gracias por tu comentario. No se que iba a decirnos Zaca si le pedimos su receta ;-) O mejor dicho si que lo se…
Bromas aparte, yo no la tengo. Pero eso me recuerda que hace tiempo que yo no preparo mis callos y si me animó haré unas fotos y publicaré la receta. Por darte una idea yo hago una salsa madrileña pero los callos los hago con chorizo y morcilla asturiana. El resultado es magnífico! Ah! y por supuesto simpre mezclo los callos con algo de pata y morro para que salgan más gelatinosos.
Lo dicho a ver si este invierno me animo. Saludos.
Jaume, siento lo de tu incidente, como dices eso puede pasar en cualquier cocina. Yo he vuelto hace poco y la comida y la atención excepcional.
Dales otra oportunidad a esas Cebollas Rellenas y a Casa Zaca porque en verdad lo merecen ;-)
Gracias por tu comentario.
Sabe alguien la receta de los callos en casa ZACA.
Muchas gracias
maluisa
Desde la reforma en enero de este año (2009), no volvía a Casa Zaca, ambiente precioso, local reformado, la comida igual de rica, pero… en uno de sus platos estrella, cebollas rellenas, encontramos un papel plata (de medicina, mantequilla, ¿?), sin apenas disculpas, unicamente en la cuenta nos quitaron el importe de 1/2 ración. DECEPCIONANTE.
A cualquiera le puede pasar, pero detalles como ese deben cuidarse y de alguna manera más elegante mantener a los clientes. DECEPCIONANTE.
Muy buenas las fotos.
La verdad es que el sitio parece altamente recomendable…
Gran reportaje JLastras…
Me pierden las judías, conozco el sitio y es una pasada.
Por cierto, me encantaría ver la foto en un tamaño aún mayor, pocas veces se presenta el pollo de esa manera (francamente, creía que era una perdíz)
Un abrazo.