Pomelo para los 4 ositos
Photo by Ibán

En la sociedad actual, donde las prisas y el poco tiempo condicionan todos nuestros hábitos, la alimentación se ha visto claramente condicionada.

Uno de estos hábitos que más observo es el consumo de zumos. Todos pensamos que tomarnos un zumo envasado es igual que tomarnos la fruta cruda, con todas las ventajas nutricionales que estas tienen, como  su alto aporte de vitaminas y minerales (por lo tanto un alto valor antioxidante), por su bajo aporte calórico y con la ventaja de que no tenemos que pelarlas o trocearlas, sólo tenemos que abrirlos y servirnos. Y no sólo esto, sino que además es el modo que estamos enseñando a nuestros hijos a consumir fruta. Siento defraudaros, pero esto no es así, se podría decir que en muchos casos es más perjudicial para la salud el tomarlos que el prescindir de ellos y ahora os comentare el por que.

Si analizáis la composición de la mayor parte de los zumos del mercado, estos provienen de concentrados, a los que se les añade: agua, azúcar, y a veces unas vitaminas, para intentarles darles un valor añadido de objeto saludable. Pero os tengo que recordar que la diabetes es una de las enfermedades que más esta creciendo en el mundo occidental, y es por el excesivo consumo de nuestros famosos hidratos de carbono, y más concretamente de el azúcar, que se encuentra en tantos productos procesados.

En un estudio llevado a cabo en Estados Unidos se analizaron a personas que consumían estos zumos azucarados una media de dos veces al día, tenían una incidencia de un 31% más de diabetes tipo 2 que aquellos que no lo consumían. El resultado era prácticamente el mismo que aquellos que consumían refrescos azucarados convencionales. Tener en cuenta que el aporte de estos zumos son calorías extras a la comida, y el azúcar añadido es uno de los peores alimentos que podéis incluir, esa campaña publicitaria de que el azúcar es algo necesario es una manipulación, que  una vez más sufrimos los consumidores por intereses creados.

El cerebro utiliza glucosa, y no azúcar, y esta glucosa la podemos obtener de infinidad de alimentos, ¿qué diferencia hay entre estos zumos y la fruta cruda que puedo consumir? pues principalmente dos:

  1. La fruta contiene fructosa y no azúcar.  La fructosa no es insulinodependiente, es decir yo no segrego insulina en su asimilación, por lo que no afectara a la diabetes.
  2. La fruta cruda contiene mucha fibra, que como sabemos es buena para el transito intestinal y ralentiza la absorción de los alimentos.

Por lo tanto comer fruta y educar a vuestros hijos en el hábito de comer fruta. Si queréis de vez en cuando le podéis dar un zumo envasado, pero con dos condiciones, ver en la etiqueta que no contenga azúcar, y la segunda que contenga la pulpa, que es la fibra de la fruta. Son como veréis bastante más caros, pero creo que nuestra salud y nuestro cuerpo se lo merecen.

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