Tuve antojo de papas fritas, pero como verán no pude parar, y con solo un par de ingredientes más, preparé este plato riquísimo. Éramos dos, noche fría, y ya tarde para ir de compras. Las otras opciones, eran sopas instantáneas o delivery o … – No sigas. De ninguna manera. ¡Dejame a mi! -.
Esta si que es una preparación simple y realmente estoy seguro que lo vas a preparar. Como fue super espontánea no tomé más fotos que la del plato terminado.
Primera consideración. No se como serán en otras familias y culturas, pero en casa cuando de papas fritas o al horno se trate, nunca son suficientes. ¡Pero nunca! No te aflijas y por el contrario ponete contento por lo rico que te salgan y no alcancen, en lugar de culparte por quedarte corto.
Ingredientes (para 2)
Papa blanca 1 kg. (como te decía, si había más, se comían más)
Pimiento rojo 1 u.
Cebolla 1 u.
Carne vacuna magra 400 gr.
Cebolla de verdeo 1 u.
Aceite de Girasol 600 cm3
Insisto que el antojo inicial era de comer papas fritas, y salió lo que salió porque eran los ingredientes que tenía a mano. Y aunque sean pocos me sirven para contarte un par trucos que te van a servir para otras preparaciones.
Por empezar la carne, esta vez se transforma en guarnición de las papas, al revés de siempre. ¡Aguanten las papas!
Procedimiento.
- Calentar en una cacerola, aceite de girasol para la fritura. Empecemos con los fundamentos: ¿Por qué aceite de girasol? – Principalmente porque es el que tenía en la alacena en ese momento. Resulta que siempre tengo aceite de girasol para realizar frituras. Es un muy buen aceite para freír porque soporta hasta 230°C, es fácil de conseguir y no es caro. Probablemente sea el aceite que tenés ahora mismo en tu alacena. No será necesario que el aceite llegue a su temperatura máxima para comenzar a freír. El aceite llega a su temperatura máxima cuando empieza a humear y se empieza a quemar. En este punto se producen transformaciones químicas que son contraproducentes para la salud, y transfieren sabores indeseables a los alimentos.
- Mientras se calienta el aceite, pelar las papas, depende del tamaño que tengan, cortarlas por la mitad y cortarla en gajos, procurando que queden de tamaños parecidos para que luego, la cocción sea pareja.
- Cuando el aceite esté caliente comenzar con la fritura. Llevará unos 25’. No tomé el tiempo realmente. Te vas a dar cuenta que están listas cuando tomen la coloración dorada. Al principio de la fritura remové las papas para asegurarte de que no se peguen al fondo o borde de la cacerola, ni entre ellas.
- Poner a hervir agua para luego cocinar los huevos pasados por agua.
- Cortar el morrón en juliana (tiritas finitas de no más de 6 cm, el tamaño que podes tomar en un bocado con el tenedor).
- Pelar y ciselar la cebolla (o juliana de cebolla, o sea cortar en tiritas también).
- Picar la cebolla de verdeo.
- Cortar la carne en tiritas del tamaño que más te guste, acordate el concepto del tamaño que podés tomar en un bocado.
- Cocinar en una sartén grande la carne. Si tu sartén no es lo suficientemente grande, lo haces en dos tandas. Es importante no amontonar carne en una sola cocción porque empieza a soltar los jugos y va a quedar hervida. Nosotros la queremos sellada. Por la misma razón no indiqué salar la carne aún, también la deshidrata. Toda la carne debe estar en contacto con el fondo de la sartén para que se selle y así los jugos no se pierden. Reservar.
- En la misma sartén que cocinaste la carne, bajar un poco la intensidad del fuego y cocinar la cebolla y el morrón en un chorrito de aceite de oliva. Esta vez si, sal y pimienta. El fuego moderado y la sal van a ayudar a que los vegetales suelten su jugo, y ese jugo levanta la caramelización de la carne que cocinaste hace un momento atrás. Toda esa caramelización realza el sabor rico característico de la carne. ¿Cuánto tiempo?, depende. Si te gustan los vegetales crujientes, como me gustan a mi, un par de minutos, sino un poco más hasta ver que la cebolla se empieza a transparentar.
- Volver la carne a la sartén, mezclar bien con los vegetales, ajustar la sal y listo por acá.
- Siempre sin quitarle la mirada a las papas eh! Poner los huevos en el agua hirviendo 6’ (seis minutos). Pasados los 6’ pasarlos a agua fría para cortar la cocción y para que los puedas pelar sin quemarte los dedos ¡claro!
- Una vez doradas las papas, las pones sobre papel de cocina absorvente. Sal , la parte verde de la cebolla de verdeo picada y ¡good show!
Creo que no me olvidé de ningún detalle. Si querés le agregas kétchup o mayonesa o queso blanco o etc. Para mi ya queda bien así, simple.
tienes razón, éste tipo de patatas, son empezar y NO parar, sobre todo si hay niños ( y no tan niños), disfrutamos todooossss.
Vaya pinta que tiene ese plato de papas!!!. Me lo voy a preparar para almorzar muy pronto, te da hambre solo de verlo. Gracias por compartir!.
Hola me recuerda un poco, aunque no tiene que ver al potaje bochero, de un pueblo de aquí, españa, que no es un potaje, aunque se llame así si quieres puedes verlo aquí: http://labitacoradetoya.blogspot.com.es/2010/11/potage-bochero.html
Es muy fácil de hacer, también de la zona es famosos el arroz con collejas :)
Papas……a la Panzaaaaaa!!!!
mmmmmmm que ricor!!!!
Me hace acordar muchísimo a un plato que comí en Cochabamba, Bolivia. Se llama “pique macho”. Basicamente es: papas fritas, morrón, cebolla cruda, pedacitos chicos de carne de vaca, huevo duro, tomate crudo, y a veces salchichas de viena. El nombre viene de que se le agregan rodajitas de locoto, un tipo de ají muy picante, verde y rojo, en crudo. En Perú le llaman rocoto. También lo sirven acompañado con mayonesa o ketchup. Un plato sencillo, muy sabroso, que me trae muchos recuerdos.
Saludos!
Cecilia