Sigo sumando satisfacciones y nuevas relaciones gracias a la gastronomía. Mi última adquisición, hablando de las nuevas relaciones, fue la gente de Loy’s a quienes descubrí por casualidad un mediodía del mes de Junio, cuando quise sentarme a una mesa bien atendida para almorzar, aunque estuviera a mitad de una jornada de trabajo.

Y así fue como salí a caminar unas cuadras, sin la certeza de en donde terminaría. Pasé por la puerta de Loy’s y me llamó la atención el hecho de que presentaba tres versiones de menú ejecutivo con valores accesibles y otros con valor un poco más exclusivo. La propuesta me interesó, tomé la más accesible y fue suficiente.

La diferencia que marcó Loy’s ese mediodía, fue el atento servicio en el salón, el hecho de que hubiera pocas mesas servidas y el ambiente muy tranqui, no enmascaró el esmero de los camareros. Adicionalmente el salón es muy lindo, con un estilo bien porteño que te lleva a muchos años atrás en el pasado.

Loy’s reabrió sus puertas de la mano de Walter y Alejandro, nuevos emprendedores gastronómicos, después de que estuviera unos ocho meses cerrado tras más de 30 años en funcionamiento en manos de su dueño anterior.

La tarea de llevar a Loy’s a su máximo potencial no será fácil, pero insisto que con la fidelidad de su gente y tan lindo salón, sumado a las herramientas de comunicación disponibles, podrá lidiar con las dificultades que se presentan en el inicio de este tipo de emprendimiento. El tiempo dirá.

Mientras tanto y fiel a mi estilo, les escribo está crónica basada en hechos que yo mismo viví, y para fundamentar lo que pienso de Loy’s, el 23 de Julio pasado organicé allí mismo el festejo del cumpleaños de mis Abuelos.

Nos reunimos a cenar catorce personas. Todo un éxito, hablando de satisfacciones, la más reciente que tomé de la gastronomía y que nunca voy a dejar de saborear.

Los platos servidos a la mesa esta vez fueron la excusa para reunir a la familia y vivir un momento verdaderamente irrepetible, la homenajeada cumplió 92 y el homenajeado 86 ¿se entiende “irrepetible”?.

En la recepción unos bocaditos de jamón crudo con la copita de jerez activaron nuestro apetito. Una entrada con reminiscencia española/italiana se plasmó en Brusquetas Capresse, mozzarela, tomates cherry y albahaca. – … ¡dale abuelo!, comela con la mano nomás, total la abuela no te mira. -

Lanières de Lomo (*) en salsa de reducción de vino tinto con Papas Noisette rebozadas, fue el plato principal y además de muy bien logrado, fue la preparación que mostró la identidad de Loy’s. Tranquilamente podría ser la especialidad de la casa.

Maridamos con vinos Malbec y Torrontés de Finca Quara.

Quise dar la nota al elegir el postre, tenía que ser una crema helada, y Alejandro propuso Helado de Queso y Dulce de Membrillo. Aunque algo jugado, resultó bien, el sabor del queso estaba en la crema y el dulce de membrillo en si mismo. A mi particularmente, me encantó, para el resto fue aceptado en distintas medidas, para algunos estuvo bien, para otros muy bien y el único que no lo aceptó fue el niño llamado “helado de crema americana y dulce de leche”, mi hijo, que no lo puedo sacar de esa combinación y ya cumplió los diez.

Brindamos con espumante, y cerramos con café.

Un ingrediente a destacar fue la esmerada y cálida atención de Silvia y Roberto, a quienes convoqué expresamente para el evento por la actitud de servicio demostrada en ocaciones anteriores.

Hasta el momento, démosle tiempo para desarrollarse, les recomiendo este restaurante para tomar un almuerzo de oficina digamos, ejecutivo, sin excentricidades, práctico, accesible y muy bien atendido a la hora de saciar el apetito en el mediodía de la city porteña.

Y descontado desde ya que si alguien me pregunta donde realizar un evento, Loy’s es uno de los primeros lugares que me vienen a la mente, el lugar y su gente me han hecho quedar muy bien con …. no con los más exigentes, pero si con los que más quiero.

Loy’s ofrece el servicio de delivery de cafetería todo el día, y de comidas al mediodía. Habrá que darse una vuelta por la tarde para probar unos tragos en semejante barra que ostenta. ¡Que se preparen!.

Les dejo algunas fotos más para mostrarles el salón y a algunos de los protagonistas de la noche.

Loy’s
Bartolomé Mitre 838
Buenos Aires. Argentina
Tel.: +54 (11) 4342.1914
email: loysrestaurant@hotmail.com

(*) Solomillo de carne vacuna.