En tanto no puedas viajar a San Juan o alguna ciudad de la región, podés darte una vuelta por el barrio de Recoleta en la Ciudad de Buenos Aires, y tendrás una idea bien acabada de los platos más tradicionales del Noroeste Argentino.

Poco menos de un año pasó desde que tuve la fortuna de viajar a San Juan y sentarme a la mesa de su gente, y a pesar de mi corta estadía quedó bien grabado en mi, el justo patrón de medida para valorar y disfrutar la cocina de El Sanjuanino.

Esta vez por simple casualidad y espontaneidad me encontré degustando platos norteños junto a Juan Pablo, viejo amigo colombiano radicado en Miami que por estos días visita B.A. Fiel seguidor de nuestro blog me halaga al elegirme como su guía gastronómico en la ciudad.

Entonces, sin reservas un sábado a la noche, no me extrañó tener que esperar mesa unos minutos, pero ¡¿qué si valió la pena?!, lean a continuación.

…¡yo te sigo mi amigo! – exclamó nuesto visitante y arrancamos con una exquisita Empanada Sanjuanina (de carne), su masa crocante y su tenue coloración indican el punto exacto de fritura, jugooooosas al punto llamarlas Empanadas de Piernas Abiertas, – ¿qué como es eso? – imaginate en la informabilidad del hogar un domingo al mediodía, la empanada oooobviameente se come con la mano, sin más soporte que una servilleta de papel, ahí nomás si si, donde te encontrás sentado, das el bocado y ¡zas!, inevitablemente el jugo se derrama y acto reflejo inevitablemente también, abrís las piernas.

El frío Buenos Aires, el mejor socio de El Sanjuanino para la venta de Locro. Nuestro mozo esa noche la tuvo fácil, pues no necesitaba escribir su comanda, el principal elegido por todas las mesas de mi alrededor era este tradicional guisado a base de maíz, zapallo y porotos. Tan típico resulta, que en las fiestas patrias como el 25 de Mayo y el 9 de Julio es un ritual prepararlo en hogares, casas de comidas, restaurantes, bodegones y en todos los lugares en general que se dedican a la gastronomía en Argentina.

Realmente es un plato muy rico, de muchas calorías y de mucho cuidado en su preparación, máxime cuando se hace en mucha cantidad, hay que manejar muy bien la técnica de elaboración.

Para cenas como la que les estoy relatando no hay muchas vueltas a la hora de elegir que beber, directamente, tinto de la casa, mejor ni preguntar por el sommelier ni por una etiqueta de alta gama, -¿de que me habla señor turista?- dirá el mozo con la certeza de que quien este preguntando por el tal “some no se cuanto”, ¡es turista extranjero!.

Muy acertado el tamaño de la porción de locro, nos permite disfrutar de un postre tan simple como sabroso, queso y dulce. Una porción de queso y dulce de cayote para mi, y de queso y miel de caña para mi amigo. ¡A eso se le llama dulce!

La verdad, que El Sanjuanino, me hizo quedar muy bien ante los ojos extranjeros, y quiero recomendarlo particularmente a nuestros seguidores que están planeando visitar Argentina; y a todos en general, estoy dispuesto a volver en el mismo momento que alguien lo proponga. Mientras tanto sigo acompañando a Juan Pablo, de manera que pronto estaré contando otra crónica bien típica Argentina.

Podrán ver en el website de El Sanjuanino que su historia no es de ayer nomás, y acerca de la fama que adquiere en el exterior.

El Sanjuanino
Posadas 1515
Buenos Aires
Argentina
Tel.: (54) 11 4804.2909
Web: www.elsanjuanino.com