He esperado, para escribir un artículo o receta interesante y original, que pasan las semanas y al final no escribo nada. Viendo el blog, me doy cuenta que la idea es sumar recetas y comentarios en general relacionados con la gastronomía, sean estos originales o no. Es por esto que me dio ganas de compartir esta simple receta, pero con la particularidad del cariño de “porque” la hago y “como” la hago.

Sin mas vueltas, el sábado pasado hice nuevamente, después de varios meses, Arroz con Leche, Nostalgia, Cariño y Paciencia (todo con mayúsculas). Una de las razones por la cual quise ser cocinero, fue pensando en que voy a hacer cuando mi abuela Antonia ya no este para cocinarme, entonces dije, -muy fácil, debo aprender mientras tanto-. Claro que NO hay caso, pero bueno me he estado esforzando y así me acerqué bastante.

Ella solía hacerme arroz con leche mas bien líquido, de manera que al finalizar el arroz, podías beber la leche saborizaba hasta vaciar el vaso. Pero me casé y a mi mujer, su mamá se lo preparaba mas bien seco. Para salir del dilema y que nos guste a todos, probé algunos tecnicismos y encontré el punto justo para conformarnos. Como resultado, me quedó un arroz con leche cremoso y muy rico que aquí os dejo con todo detalle.

Ingredientes (2-3 personas)

½ litro de Leche “La Serenisima”, claramente, pues sabréis que su productor es el principal socio de Danone Argentina, entonces ¡aaatención!

Arroz Doble Carolina 100g. En Argentina, una marca líder y de muchos años en el mercado es “Gallo”. El Doble Carolina es una variedad de grano blanco, ni muy largo, ni tampoco muy gordo, pero evidentemente de mucho contenido de almidón, visto que tras una cocción lenta y cuidada queda verdaderamente muy cremoso. También podría haber usado la variedad Carnaroli, de grano corto, gordo y también con mucho contenido de almidón, pero el Doble Carolina es más sembrado y tradicional en Argentina, y esto es lo que quiero trasmitir, cosas que sean mas de estas latitudes.

Esencia de Vainilla c/n Queridos amigos, te voy a ser muy sincero, aquí debería decir … Chaucha de Vainilla ½ unidad. Pero no querréis saber cuanto nos cuesta en Buenos Aires una vaina de estas! De nuevo en este ingrediente estamos siendo más autóctonos, pero a la fuerza. De todas maneras, y para una receta doméstica la esencia de vainilla, creeme, va muy bien.

Almendras 100 g. Este ingrediente es completamente opcional, de hecho lo voy a mantener apartado porque a mi mujer, le suena a que estaría comiendo un grano de arroz crudo, pero a mi siempre, pero siempre, me gusta encontrar el componente crocante. Este ingrediente nada tiene de autóctono, lo tomé de la preparación tradicional de la versión sueca Jule Riesengrod.

Azúcar 25 gramos. (para los niños 50 gramos. declararon quererlo más dulce).

Crema de leche 300 g. “La Serenísima”.

Cáscara de 1 limón.

Canela en rama c/n.

Preparación

1. Llevar la leche a ebullición y bajar a fuego lento.
2. Incorporar el arroz, la esencia de vainilla, las cáscaras de limón, el azúcar y la canela en rama.
3. Revolver continua y suavemente durante 5’ y tapar la cacerola.
4. Y aquí viene el ingrediente de paciencia, pues se debe acompañar de ratos, destapando y revolviendo, para que el arroz desprenda su almidón y logre untuosidad naturalmente, durante no menos de 40’. Uno irá probando cuan blandos van quedando los granos.
5. En el mientras tanto, batir la crema a medio punto y reservar en la heladera. También será buen momento para pelar las almendras, tostarlas para que desprendan sus aceites, y machacarlas en trozos tan pequeños como se pueda.
6. Una vez cocinado el arroz, dejar que baje a temperatura ambiente. Y quitar las cáscaras de limón y las ramas de canela.
7. Unir con la crema de leche.
8. Llevar a la heladera (frigorífico) para servir completamente frío.

Trucos: Para pelar las almendras, sumergirlas 5’ en agua hirviendo y luego quitarles la cáscara con la ayuda de un paño. La cáscara de limón, puede ser reemplazada por la de naranja, pero en cualquiera de los casos no deben tener partes blancas, eso le trasmitiría amargor.

Presentación

Servir en una fuente o el boles o copas. Aquí es donde agrego las almendras, al momento de servir, sólo para a quienes lo prefieran.