Este fin de semana me han regalado un calabacín de un kilo y hemos decidido hacerlo en crema fría, utilizando una receta muy ligera sin aceite y sal. Curiosamente, el plato no queda soso y tampoco echa de menos algún aliño tipo picatoste. Sin embargo, para darle un poco de gracia añadí un poco de cebolla deshidratada para decorar.

Ingredientes (4 personas)

2-3 calabacines (1 kilo aprox.)
2 vasos de agua
8 quesitos
4 cucharadas de cebolla deshidratada

Preparación

Se pela, trocea y cuece el calabacín en el agua hirviendo durante 25 minutos a fuego lento. Tras esto, comprobar la densidad y retirar el agua sobrante con una cuchara. Sin dejar enfriar se añaden los quesitos dejando cocer durante 5 minutos tras lo cual se retira el fuego y se tritura con la batidora hasta obtener una consistencia de crema.
Se deja templar antes de introducir en la nevera.

Presentación

Servir frío y decorar con una pizca de cebolla deshidratada.