Un plato muy común en oriente es el sujeto de nuestra receta semanal. El humus, o pasta de garbanzos es un plato sorprendente en todos los aspectos, rescatado para occidente por los círculos vegetariano se puede degustar sólo o acompañado, como plato principal o guarnición.
Ingredientes (para 2-3 personas)
1/4 kilo de garbanzos cocidos
2 dientes de ajo
50 cl de aceite de oliva
2 cucharadas de semillas de sésamo (hay quién utiliza tahina o pasta de sésamo)
1 cucharada de comino
Sal
Zumo de 1 limón
Preparación
Se trituran todos los ingredientes con un electrodoméstico a máxima velocidad hasta que cuaje una pasta fina. Personalmente prefiero ligar ligeramente el ajo con el aceite antes de añadir los garbanzos y el resto de los ingredientes. También, he visto recetas que incluían yogurt y otras con cilantro en este caso añadirían estos ingredientes al final y lo mezclaría con un tenedor.
Presentación
Presenté la pasta en una fuente junto a tostas de maíz (a modo de dipeo) para que cada comensal picara, en otras fuentes dispuse guacamole y pico de gallo. Otro modo de servirlo consiste en añadir un poco de aceite de oliva virgen y pimentón.
Espero que os guste.
Estimados, sin llegar al “fundamentalismo” aunque reconozco que me ha encantado, para mi es indispesable el Tahine y degustarlo con pan de pita.
Para presentarlo prefiero el comino molido en lugar del pimentón.
A ver si me animo y un día publico las recetas del Kebab de Kefta para la que siempre hago Humus, la combinación es espectacular (ver fotos)
Muchas gracias “2ruedas”.
Lo cierto es que estaba esperando tu aportación como experto conocedor de este plato, con tus comentarios el post queda redondo.
Amigo ‘crastino’, por este plato de origen libanés siento auténtica pasión, y, aunque aumente un poco el tiempo de preparación, recomiendo no realizar el Humus triturando todos los ingredientes a la vez.
Yo prefiero triturar primero los garbanzos (añadiendo algo de su líquido de coción si fuera necesario para que no quede muy muy espeso); y por separado, el ajo junto con el limón y el tahine (o tahini -esta pasta de sésamo cada cual la nombra de una forma-), y a continuación el resultado de esta mezcla incorporarlo al puré de grabanzos, añadiendo a poquitos aceite de oliva para ligarlo bien. Para acabar, añado el comino y sazono (algo de pimienta no le viene mal). A la hora de servirlo, peco de “fundamentalista” y lo presento en un plato o fuente, donde lo extiendo sin que alcance una altura mayor a un dedo, añadiendo un chorrito de aceite y el consabido toque con el pimentón. Y hala, a comer ayudados por un buen pan de pita (aunque hay quien prefiere hacerlo con ‘palitos’ de zahanoria cruda o incluso apio).
Por cierto, otra pasta/puré muy similar, también libanés, es el Baba Ghanoush, cuyo ingrediente base es la berenjena en vez de los garbanzos (aunque cambian un poco las proporciones -menos limón y menos aceite, y se prescinde del comino-), y además éste se puede presentar decorado con perejil picado.