Una de las maravillas que nos trae el otoño son sin duda, las setas silvestres, aunque este año no ha sido especialmente bueno en la sierra madrileña, por falta de lluvias y humedad en los bosques.

Sin embargo, si vais a cualquier buen mercado de la capital, yo os recomiendo el Mercado de Chamartín http://mercadodechamartin.com/ (la web no le hace justicia), en otoño podréis encontrar múltimples varidades silvestres y cultivadas procedentes de diferentes puntos de la geografía española.

A continuación tenéis algunas de las setas más conocidas:

Agaricus Brunnescens – Champiñon Blanco
Russula cyanoxantha – Seta de cardo
Lactarius deliciosus – Níscalo
Morchella esculenta – Colmenilla
Cantharellus cibarius – Rebozuelo
Cantharellus Lutescens – Rebozuelo Anaranjado
Amanita caesarea – Huevo de Rey
Boletus edulis – Hongo o Boletus o Seta Calabaza
Marasmius oreades – Senderuela
Cantharellus Cornucopioides – Trompeta de los Muertos
Calocybe Gambosa – Perretxico o Seta de San Jorge
Agrocybe aegerita – Seta de chopo
Lentinula Edodes – Shiitake
Flammulina velutipes – Enoki
Pleurotus ostreatus – Orellana o Seta de ostra
Tuber melanosporum – Trufa negra
Tuber aestivum – Trufa rosada y blanca

Tener en cuenta que las setas frescas adquiridas en estos comercios deben comerse en un plazo máximo de un par de días, incluso si las conserváis en la nevera. La mayoría de estos hongos tienen un 90 por ciento de humedad por lo que no debéis lavarlas porque les quitaríais parte de su sabor, utilizar únicamente un trapo húmedo o cepillo suave para eliminar los restos de suciedad o tierra que pudieran tener.

 

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
Publicidad