Como ellos mismos publican en su web como presentación de sus restaurante “Quien a su padre parece, honra merece”.

No hay mejor forma que este sabio refrán popular para describir la figura de Tomás Casanova que no para de hacer gala de sus orígenes al contar como en su familia desde tiempos inmemoriales han sido molineros, y de rendirles un continuo homenaje con su restaurante al que bautizó hace ya casi 30 años como El Molino. Alcarreño por nacimiento y por vocación, este castellano, molinero y panadero en sus Romancos natal, desembarcó en Madrid en el año 1960 para hacerse cargo del restaurante de la Casa de Guadalajara. Allí, según confiesa, sin apenas conocer el mundo de la restauración (lo que sí sabía hacer y muy bien era asar corderos y cochinillos como lo hacía en el horno de su panadería) comienza con su inseparable mujer Amparo a cocinar. Después de unos años, en 1965 su paisano Manuel Criado del Val le lleva a los Festivales de Hita como Maestro Asador; su rotundo éxito le hace repetir en 1966 y decidirse a abrir su propio negocio al que llama El Molinero, un nombre con el que le conocen en su pueblo. En 1977 compra una casa de campo, en los aledaños de San Sebastián de los Reyes, que se había convertido en un comedor para las industrias de la zona y a la que vio gran porvenir. Remodelaría y convertiría en lo que hoy ha sido una tarea de muchos años, de empeño y tenacidad, de trabajo y pasión por la vida y la cocina. Pero eso es lo que Tomás es : perseverante, locuaz, insistente y claro “al pan, pan; y al vino, vino”. Nada se le pone por delante y consigue llevar a cabo todos sus proyectos. Por este carácter se ha convertido en ejemplo para muchos asadores, “cual es el hombre, tal es su fortuna y nombre” y así entre sus méritos se encuentran numerosos galardones en reconocimiento a su labor.

Llevaba mucho tiempo queriendo visitar el Molino de Algete y el otro día aprovechando un compromiso infantil en un complejo cercano decidimos escaparnos a comer a El Molino, aprovechando el descanso del mediodía.

Lo primero que sorprende del lugar es su carácter castellano, el género y productos expuestos antes de entrar al comedor, su gran horno de leña y el ambiente de buena mesa y buen comer que respiran sus paredes. Es uno de estos sitios que según entras ya sientes y sabes que comerás bien.

Su carta es bastante amplia donde destacan las especialidades castellanas en especial buenos embutidos, queso y jamón, los asados y las carnes. Hoy en día los restaurantes están gestionados por los hijos y nietos de Tomás Casanova y aunque hemos estado en el de Algete, todos sus locales se distinguen por su calidad y las excelentes materias primas. También excelentes exponentes de sus propias huertas como sus lechugas y tomates y algunas otras verduras y hortalizas como trigueros, cardos, pochas o pimientos que preparan asados en ensaladas.

En los pescados y mariscos también hay variedad con excelentes gambas, cocochas, bacalaos y merluza, todos ellos en disponibles en diferentes preparaciones.

Nosotros éramos dos personas por lo que no probamos demasiadas cosas, pero la media ración de  jamón ibérico servido con pan con tomate fue excelente, así como los pimientos asados aderezados simplemente con un poco de ajo picado y excelente aceite de oliva virgen. Los segundo un rico costillar de cochinillo asado y medio entrecot de carne roja, un corte de una tamaño ideal para una persona de apetito normal.  De postre un delicioso y gran flan de huevo de la casa acompañado de tejas para cerrar una magnífica comida. Buen servicio y atentos detalles junto con un Tarsus tinto de Ribera de Duero complementaron una excelente comida en un lugar tranquilo y agradable donde se aprecia y saborea la tradición familiar y el saber hacer gastronómico de la  familia.

Restaurante Asador El Molino
Ctra. De Algete, Km 1 (desvío Km. 23 de la N-1)
San Sebastián de los Reyes (Madrid)
Tel.: +34 91 653 59 83
Tel.: +34 91 651 99 85
Web: http://www.asadorelmolino.com